Actualizado a 30/06/2021
En el artículo de hoy, queremos introducir brevemente el concepto de ecoarquitectura. Esto nos llevará a conocer la importancia de la sostenibilidad en los proyectos arquitectónicos.
El estudio del impacto ambiental, la utilización de materiales que aíslen los edificios o hacer uso de la luz natural, como podemos ver en este despertador solar que se ha desarrollado hace poco, son parte esencial de este movimiento.
Ecoarquitectura y arquitectura sostenible
Para no detenernos en detalles técnicos que luego veremos con más profundidad, la definición de arquitectura ecológica es la forma de concebir el diseño arquitectónico de una manera que minimice su impacto ambiental. Esto no solo implica al espacio natural, también a los propios habitantes y vecinos.
La ecoarquitectura requiere de una evaluación de impacto ambiental que considere cómo afecta el diseño y la construcción de los edificios al entorno. La climatología, los ecosistemas cercanos o la hidrografía de la zona son claves para facilitar la obtención de los recursos que permita reducir el consumo de combustibles no renovables.
El principal objetivo de la ecoarquitectura es desarrollar casas con eficiencia energética, que tengan plena habitabilidad y un balance energético mínimo. Existe mucha literatura al respecto y se conocen diversos proyectos que han salido adelante. ¡Vamos a ver algunos factores que influyen en esta corriente!
La vivienda y su entorno: naturaleza y humanización
Como hemos apuntado antes, la ecoarquitectura no solo quiere producir un bajo impacto en el medioambiente, también formar un entorno humano que satisfaga las necesidades de los vecinos. De esta forma, la eficiencia energética puede hacer que todos tengan acceso a los diferentes recursos sin ningún problema.
Materiales reutilizables y de base natural
Uno de los puntos más consistentes de la arquitectura sostenible es el uso de estructuras y materiales de base natural y que puedan volver a ser reutilizados. Los productos reciclados o de segunda mano permiten que se reduzca la necesidad de producir materiales nuevos, por lo que la energía necesaria también es menor.
Uso sostenible de los recursos, procesos ambientalmente responsables y energías renovables
La optimización de los recursos naturales y su aprovechamiento también es un pilar clave en la ecoarquitectura. Por ejemplo, la energía solar térmica tiene una gran influencia y es muy habitual ver paneles solares en cualquiera de estas construcciones. La máxima es clara: ningún recurso renovable debe utilizarse a un ritmo superior al de su generación y ningún contaminante debe producirse a un ritmo superior al que pueda ser absorbido por el medioambiente.
Aislamiento
Para reducir el uso de calefacción y aire acondicionado, es importante contar con un buen aislamiento. Muchos de estos proyectos cuentan con paneles sándwich como los que se instalan en las construcciones industriales y agrícolas, ya que permiten minimizar las pérdidas de calor y hacer edificios energéticamente eficientes.
¿A qué problemas se enfrentará la arquitectura del futuro?
Sin duda, una rama de la arquitectura que debe explorarse, estudiarse y aplicarse es la ecoarquitectura o arquitectura sostenible. En todas sus dimensiones y profundidad, la sostenibilidad debe ser tenida en cuenta. Así, los proyectos del futuro no condicionen la viabilidad del planeta y del ser humano.
Controlar el impacto ambiental de estos proyectos será un requisito básico para cualquier acción y, de hecho, ya se están poniendo en marcha normativas que nos llevan por ese camino. Entre todos debemos colaborar para hacer del mundo un lugar habitable para nosotros, nuestra descendencia y todos los seres vivos que habitan en él.
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